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¿En qué consiste el alquiler con opción a compra?
La coyuntura socioeconómica que vivimos hace unos años, hizo que muchas personas que querían comprar una vivienda finalmente decidieran no hacerlo y vivir bajo alquiler. Muchos de estos contratos de alquiler contemplaban la opción de compra de la vivienda.
Actualmente estamos dando los pasos para dejar la situación crítica del sector inmobiliario atrás pero esta modalidad de acceso a una vivienda sigue siendo una apuesta fuerte tanto por los inquilinos, los propietarios de inmuebles y por los profesionales del sector.
¿Qué significa un alquiler con opción a compra?
Un alquiler con opción a compra es un contrato doble o mixto compuesto por dos subcontratos: uno de alquiler y otro de compraventa. Esto significa que permite al inquilino estar de alquiler en una vivienda durante el tiempo estipulado en el contrato (lo habitual son de dos a cinco años) en el que, pasado ese tiempo, tiene el derecho a comprar esa vivienda por el precio estipulado en el contrato, descontando la parte del alquiler pagado con anterioridad.
Esta modalidad puede resultar beneficiosa para ambas partes puesto que el inquilino puede vivir alquilado a la vez que está invirtiendo en una posible compra y el arrendador, sigue teniendo su vivienda en alquiler con la prima como seguro.
¿Es más elevada la cuota de alquiler?
No tiene porqué ser más o menos elevada que en un contrato de alquiler habitual, en cambio implica un desembolso inicial. Esto se debe a que la prima por la opción a compra es más elevada que la fianza de alquiler.
¿Qué pasa si al finalizar el contrato decido no comprar?
Al contrario de lo que sucede con las fianzas, si decides no comprar, la prima de opción a compra no es recuperable.
A tener en cuenta
La modalidad de contrato de alquiler con opción a compra es atípico, que no está contemplado por la Ley y que no aparece regulado de forma expresa en el Código Civil, aunque está aceptado y reconocido en el Reglamento Hipotecario y en la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU).
Es muy importante entonces que todas las condiciones queden muy bien definidas y claras en el contrato.
Además deberán estipularse las dos condiciones esenciales de la compraventa: el objeto de contrato y el precio. Así como también todas las condiciones relativas al arrendamiento y a la compra.
